El sábado descubrí que no me pueden sacar el banjo ni a piñas. Literalmente.
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El sábado descubrí que no me pueden sacar el banjo ni a piñas. Literalmente.
Dos malechores en moto se acercaron a la puerta de la casa de Berenice, mientras los famosos Trinos de Juárez charlaban pacíficamente en la vereda. Ante la pregunta: "chicos, ¿tienen hora?" y la sospechosa situación, todos menos quién les habla, entraron rápidamente a la casa a refugiarse. Yo, colgado de la palmera, no. Entonces uno se baja e intenta tomar el banjo por el mástil al grito de "dame la guitarra". En ese momento mi reacción fue, quizás imprudente pero sincera, aferrarme al cuerpo del instrumento, mientras, en un acceso de idiotez, le comunico al caco que "no es una guitarra". Acto seguido, frustrado por el aparente fracaso de la operación, el muchacho se acerca y me propina un puñetazo que me tira contra la ya cerrada puerta del hogar. Intenta nuevamente desposeerme el banjo, pero fracasa, otra vez, en el forcejeo. Mientras este segundo intento tomaba lugar, yo ya me había incorporado y hacia fuerza hacia la dirección contraria a la cual estaba dirigida la moto. Ergo, ni bien las manos del susodicho soltaron el mástil, comencé a correr para alejarme de la situación. Acá es en donde algo muy gracioso sucedio y no pude evitar reírme, que fue lo siguiente. El fracasado sujeto, intentó subirse a la moto, pero su enojado compañero, le dijo: "¡pero sacale la mochila por lo menos!". El segundo se da vuelta para completar la orden, pero yo ya estaba a mitad de cuadra. Aparentemente, ante las emergencias, corro muy rápido. Finalmente, sumidos en el total fracaso, los ladrones se alejan en su moto para ser el hazmereír de la organización delictiva.
Saldo:
- Al banjo le quedó apenas torcido el mástil. Nada que no pude arreglar con un simple movimiento en forma de rosca.
- La destrucción completa de la funda, la cual ya estaba hecha culo anteriormente.
- Una vena interna de la nariz rota que se curó muy rápidamente.
- La eterna frustración y vergüenza de los dos potenciales ladrones que no pudieron robarle la "guitarra" a un pequeño ser, ni a piñas. Ni a piñas.
Esto fue, Reporte.
Saldo:
- Al banjo le quedó apenas torcido el mástil. Nada que no pude arreglar con un simple movimiento en forma de rosca.
- La destrucción completa de la funda, la cual ya estaba hecha culo anteriormente.
- Una vena interna de la nariz rota que se curó muy rápidamente.
- La eterna frustración y vergüenza de los dos potenciales ladrones que no pudieron robarle la "guitarra" a un pequeño ser, ni a piñas. Ni a piñas.
Esto fue, Reporte.
Re: El sábado descubrí que no me pueden sacar el banjo ni a piñas. Literalmente.
Ahora, vean todos que mágico es el mundo:
Producto del forcejeo, la ya arruinada funda en donde llevaba el banjo se terminó de arruinar del todo. Con esto quiero decir que quedó realmente inutilizable. Era una funda de guitarra chica y no era lo mejor para el banjo. En el día de hoy me aproximé a EcoMusic, con el plan de conseguir una funda un poco mejor, pero, obviamente, sin esperar mucho el éxito. Ya anticipaba el resultado de terminar comprando una funda fea de guitarra chica de nuevo. Me acerco al joven que atiende, le hago la consulta; éste se acerca a la dueña y le repite la pregunta, y la dueña le dice: "fijate que creo que hay una funda de banjo arriba, justo". Lloré. Llegó la funda, la probamos, entró perfecto. Soy Feliz. Algunos le dirán karma, otros le dirán magia: yo prefiero el término "tener ojete".
Producto del forcejeo, la ya arruinada funda en donde llevaba el banjo se terminó de arruinar del todo. Con esto quiero decir que quedó realmente inutilizable. Era una funda de guitarra chica y no era lo mejor para el banjo. En el día de hoy me aproximé a EcoMusic, con el plan de conseguir una funda un poco mejor, pero, obviamente, sin esperar mucho el éxito. Ya anticipaba el resultado de terminar comprando una funda fea de guitarra chica de nuevo. Me acerco al joven que atiende, le hago la consulta; éste se acerca a la dueña y le repite la pregunta, y la dueña le dice: "fijate que creo que hay una funda de banjo arriba, justo". Lloré. Llegó la funda, la probamos, entró perfecto. Soy Feliz. Algunos le dirán karma, otros le dirán magia: yo prefiero el término "tener ojete".
Re: El sábado descubrí que no me pueden sacar el banjo ni a piñas. Literalmente.
Claramente Monchi Balestra te estaba cuidando desde el cielo.
Re: El sábado descubrí que no me pueden sacar el banjo ni a piñas. Literalmente.
uou no conocia esta cadena de acontecimientos!!! que bueno eso de tener ojete!!! se tendria que poner de moda
chevrolentizia bloiswagen- Mensajes : 23
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